ESTAFA $LIBRA
“Decreto mi propia inocencia y la de mi hermana Karina Milei en la estafa $LIBRA. Archívese”
Presidente Javier Milei, Decreto 332/2025 (paráfrasis)
***De un plumazo, sin fundamentos, el Presidente decretó su propia inocencia y la de su hermana en la estafa $LIBRA. Pasaron tres meses de la creación de la comisión de investigación dispuesta por él mismo, cuando la eliminó sorpresivamente, sin mencionar un solo fundamento. Cuando se le requirió las razones de tal medida, el gobierno se limitó a decir que eran “secretas”. Asumiendo su propia impunidad, el libertario sigue caminando, empujado por ciudadanos que no atinan a hacer funcionar sus cerebros.
A esta altura de la presidencia del libertario, nadie medianamente consciente puede ignorar que nuestro primer mandatario es el campeón mundial en lanzamiento de teorías insólitas, que atentan contra el sentido común, las leyes de la naturaleza, el ordenamiento jurídico y todo principio ético y moral, sin que se le mueva un pelo de su frondosa cabellera.
¿Podremos pensar que le falta un tornillo? Es probable, pero además es un gran prestidigitador de la verdad, para su provecho, y esconde, detrás de su extravagancia, una mendacidad insensata que le sirve para que una importante mayoría social lo siga como corderos sin cerebro al pastor.
Sin ponerse colorado, arrojó de manera voladiza una teoría sobre el capital y el trabajo. No ya que contradijo las concepciones marxistas solamente, sino también las propias liberales, desde Adam Smith hasta Milton Fridman.
En el encuentro del Latam Economic Forum, dijo que “los trabajadores están explotando a los empresarios, porque son los que les compran dinero a cambio de su trabajo”, agregando muy suelto de cuerpo a su auditorio que “No sé si se acaban de dar cuenta de que termino de destruir la teoría de la explotación”.
No es el objeto de este artículo realizar un análisis económico de una teoría que se cae por el propio peso de su ridiculez. Es más, mañana podría afirmar que la ley de la gravedad funciona al revés, no es la manzana la que cae al piso, sino el piso que se eleva hacia la manzana.
“Con las únicas razones de su propio poder, el presidente cerró la investigación por el caso $LIBRA, absolviéndose a sí mismo y a su hermana Karina. Los fundamentos son “secretos de estado”
El razonamiento que expuse está dirigido a señalar que Javier Milei no sólo formula teorías descabelladas, sino que su conducta presidencial frecuentemente colisiona con las normas jurídicas de su propio país y con los principios éticos y morales que son comunes a todos los habitantes del mundo.
Es lo que pasó con el Decreto 332/2025, que dispone la eliminación de la “Unidad de Tareas de Investigación (UTI), que fue creada apenas tres meses antes por Decreto 114/2025 para “investigar los posibles vínculos entre el Poder Ejecutivo y la promoción del token digital $LIBRA”.
Por si hiciera falta, aclaro que el Poder Ejecutivo está encarnado por el Presidente de la Nación, es decir Javier Milei, y que los vínculos lo apuntan directamente, por ser el que aportó un elemento fundamental en la estafa: el tuiteo de la máxima autoridad argentina apoyando el token.
También, la innegable relación con los creadores y promotores de la estafa, a los que recibió en audiencias oficiales, la última unos días antes de la estafa. Además, la constante conexión a través de foros y trabajos anteriores que el propio primer mandatario hiciera con las firmas de los estafadores.
Asimismo, a través de distintas declaraciones, es altamente probable que la Secretaria General de la Presidencia, Karina Milei, “vendiera” las audiencias con su hermano, circunstancia que debería también ser objeto de profunda investigación.
La actuación de la justicia será objeto de tratamiento más adelante. Baste decir que la jueza a cargo de la investigación, María Servini, recién tres meses posteriores a los acontecimientos, ordena el allanamiento de las cajas bancarias de los empresarios involucrados. Las autoridades bancarias habían informado que dos días después del escándalo, dichas cajas fueron vaciadas por sus propietarios.
“La justicia argentina, tiempista como pocas, ordenó el allanamiento de cajas bancarias luego de tres meses de iniciada la causa. El banco informó que las mismas fueron vaciadas apenas dos días luego del escándalo”
Volvamos al presidente. El objeto principal de este artículo es destacar que el decreto que cierra la investigación en el ámbito del poder ejecutivo, viola el principio más elemental del derecho y del sentido común: nadie puede ser juez de sí mismo.
Pues bien, con un descaro rayano en el absoluto desentendimiento moral, Javier Milei, el presidente de la Nación, el promotor de la cripto $LIBRA, el que crea la comisión para su propia investigación, sin ponerse colorado decreta su propia absolución, disponiendo el cierre de la comisión investigadora.
Pero eso no es todo. Si quieren más, hay más. En el decreto respectivo, no hay un solo fundamento de la medida, no hay un análisis de las pruebas colectadas, de los trámites investigativos, de la declaración de los presuntos responsables.
Cuando se pregunta sobre los fundamentos del decreto y se solicita el acceso a las actuaciones, desde el gobierno se expresa que ello es “secreto”, sí, ¡secreto!
Cartón lleno. El presidente, principal sospechado de partícipe en la estafa, dispone cerrar la investigación de su propia conducta (y la de su hermana), sin fundamentos públicos, en “secreto”. Juez y parte. Cartón lleno.
Lástima que Franz Kazka no esté vivo, porque la situación le serviría para uno de sus geniales textos. Pero tal vez en la Argentina perdería frescura, porque esto ya se está convirtiendo en moneda corriente.
Tengo una teoría que dejaré para otro artículo. Más que una teoría es una concatenación de hechos e indicios que le dan sentido a la ruta del dinero Libra, desde la estafa, pasando por el avión privado con valijas y terminando con la financiación de las campañas políticas.
“LCA. La corrupción avanza, en un gobierno que padece del sentimiento de impunidad que dan el poder y los votos. Como los Kirchner, vió?”
Los que creíamos que con los manejos de los Kirchner en el poder ya nada podría sorprendernos, lamento decirles que nos equivocamos. En la Argentina del siglo XXI nada es demasiado y todo es insuficiente.
Pero, es tan descarado el proceso de la estafa $LIBRA, en el que, posteo presidencial mediante, un grupo de cuentas muy cercanas a Milei se quedaron con millones de dólares de los inversionistas, que gran parte de la sociedad es casi ya cómplice de las trapisondas, al hacer oídos sordos y ojos ciegos a maniobras delictuosas del poder hechas a la luz del sol.
Pero Milei no las tiene todas consigo. Puede autoabsolverse, puede jugar con la complicidad de una morosidad inaceptable de la justicia argentina, puede hablar con los “héroes” legislativos que lo salvan siempre en el juego del “toma y daca”, pero hay otros movimientos, otros países, otros magistrados, que también están investigando.
La demanda colectiva por la estafa $LIBRA que se inició en los tribunales del estado de Nueva York, adquirió otra dimensión. Pasó del fuero estadual al fuero federal, unificándola con otra demanda que afronta Hayden Mark Davis, el asesor del presidente y cerebro detrás de la maniobra.
Aun cuando en dichas demandas, no se incluye a Milei y Karina ni a Novelli y Terrones Godoy, para evitar un seguro contrapunto dilatorio con el estado argentino, la sentencia también determinará la participación presidencial.
Es más, cuando el libertario pierda el poder, la tiempista justicia argentina estará golpeando su puerta. Y allí, ni su amigo Trump podrá salvarlo.
Dr. JORGE EDUARDO SIMONETTI